sábado, 22 de junio de 2013

Gracias

Será la primera noche en vela que sabía lo que tenía que pasar. Desde el primer día presentí que eso iba a ser importante. Tenía que aprender de tí.
No por tu edad, ni por tu experiencia. No por que hallas vivido más que yo. Ni porque seas del país que me hospeda.
No ha pasado un mes que ya aprendí la primera lección.
No hay nada más importante en esta vida que quererse a uno mismo. Y quererse bien. Que el amor hacia el otro tiene que ser sin cambio a vueltas. Unidireccional, puro, sin esperar nada a cambio. Sólo así uno es capaz de amarse a uno mismo tanto o más como puede amar al otro y evitar que éste te hiera. Porque las personas somos seres sociales, pero tenemos que evitar que lo que piensen los demás nos influya a nosotros demasiado, que lo que por mucho daño que te puedan hacer, éste sólo sea transitorio, y sólo sirva para hacerte más fuerte.

Así que seas tú o sea yo, o sea ella, la tercera. O el cuarto. A todos,

Gracias


PD. Mi intercambio no es ni la pura fiesta, ni aprendo la vida en medicina. Pero crezco a cada segundo como persona


En palabras de John Lennon:


"Nos hicieron creer que el “gran amor”, sólo sucede una vez, generalmente antes de los 30 años. No nos contaron que el amor no es accionado, ni llega en un momento determinado. Las personas crecen a través de la gente. Si estamos en buena compañía, es más agradable.

Nos hicieron creer que cada uno de nosotros es la mitad de una naranja, y que la vida sólo tiene sentido cuando encontramos la otra mitad. No nos contaron que ya nacemos enteros, que nadie en la vida merece cargar en las espaldas, la responsabilidad de completar lo que nos falta.

Nos hicieron creer en una fórmula llamada "dos en uno": dos personas pensando igual, actuando igual, que era eso lo que funcionaba. No nos contaron que eso tiene nombre: anulación. Que sólo siendo individuos con personalidad propia, podremos tener una relación saludable.

Nos hicieron creer que el casamiento es obligatorio y que los deseos fuera de término, deben ser reprimidos. Nos hicieron creer que los lindos y flacos son más amados. Nos hicieron creer que sólo hay una fórmula para ser feliz, la misma para todos, y los que escapan de ella están condenados a la marginalidad. No nos contaron que estas fórmulas son equivocadas, frustran a las personas, son alienantes, y que podemos intentar otras alternativas.

Ah!, tampoco nos dijeron que nadie nos iba a decir todo esto... cada uno lo va a tener que descubrir solo. Y ahí, cuando estés muy enamorado de tí, vas a poder ser muy feliz y te vas a enamorar de alguien.
Vivimos en un mundo donde nos escondemos para hacer el amor… aunque la violencia, se practica a plena luz del día..."


miércoles, 19 de junio de 2013

Llorar por los dedos

Ahora mismo tengo ganas de llorar por los ojos, y para no permitirlo, voy a empezar a llorar por los dedos. Voy a reflejar en esta pantalla de ordenador, como tantas otras veces he hecho, lo que pasa, lo que siento.
Estoy sola. Mas sola que la una. A 14.000km de casa, y se dice pronto. Y curiosamente no me he sentido tan sola nunca, o no lo he recordado así antes.
Y es que esto no tenía que funcionar así. Esto iba de irme sola para volver sola, pero algo más entera. Volver con esa parte de mi que tanto ansío encontrar, que tanto necesito llegar. Esa media naranja, dicen. Pero siendo sensatos, me conformaba con encontrar un pequeño gajo. Y no encontrarla fuera, sino dentro de mí.
Así que en estas andaba trabajando cuando viene medio pomelo y me engaña. Parecido por fuera, distinto por dentro. Me dice cuatro cosas bonitas y me encandila. Qué rápido me vendo. Qué puta. Llega y tira por el suelo todo mi esfuerzo. Me ha hecho ver la jodida realidad. Aparece y me hace volver a caer en esa falacia de querer a través del otro para poder quererme a mi. Qué jodida la cosa. La de pasos que he andado para atrás. Eso de dejarse llevar no es tan fácil. Ni mucho menos. Si dejarse llevar implica perder la consciencia de uno mismo, depender tu felicidad del otro. Eso es dejar de ser.

Que no vine a enamorarme. Que tengo fecha de llegada y fecha de partida. Que todo esto no será más que un recuerdo pasajero, algo que quede ahí. Pocas fotos, algunas imágenes. El recuerdo.

Y es que la claridad llega como una brisa de aire que llega, y te despeja las nubes
Cosas tan claras reflejadas ahora por escrito. Tan difíciles de ver en el ayer.

Si me preguntas ¿Por qué estoy contigo? Por que he vuelto a caer en el error de que mi felicidad, durante el tiempo en que aquí resido, depende de vos.


Suena: El amor, Ricardo Arjona


martes, 18 de junio de 2013

Quienes somos. Qué queremos.

Sabeis, recientemente andaba yo algo confusa con eso que llamamos identidad personal. Básicamente me preguntaba si yo era tal y como los demás decían de mi. No es por tirarme piropos, ni muchísimo menos, pero últimamente me habían clasificado como una persona buena, cariñosa y linda. Curioso. Dejando de lado que la propia autoestima no la tengo por las nubes, sé que lo de linda es un chamullerismo argentino. Lo de buena y cariñosa es algo que me hace dudar más.
Como ya he dicho más de una vez, he hecho daño y mucho a dos de mis mejores amigos. ¿es eso ser buena? Inconscientemente, cierto es, pero lo hice y no tiene vuelta atrás. Soy egoísta en ciertos ámbitos de la vida y suelo ir a mi bola, muchas veces sin pensar en lo que pueda pasar a los demás.
Soy una persona fría, o al menos eso quiero parecer. Lo he dicho siempre, aunque en el fondo siempre lo he dudado. Recuerdo mi primer desamor, en el que me encerré en una cajita de cristal, me volví roca, y quise cubrirme de capas y capas de cebolla para protegerme del exterior. Igual esa es la imagen que yo he hecho de mí. La de alguien que quiere protegerse de los demás. Por que todo el mundo hace daño. Por que yo lo hago.

En estas ando cuando llego a otro país, y conozco a gente nueva. Gente que ve lo que eres ahora, sin saber qué era tu pasado. "Yo no soy como crees que soy", le digo. "Tu eres lo que enseñas al mundo que eres". Quizá soy yo la que estaba equivocada.

Y en estas ando de nuevo, pensando qué quiero hacer con mi vida, qué me hace feliz y qué  qué  qué. Cuando viene hoy un chico al hospital por intentar cortarse las venas, está conmigo media hora y se va. "¿Qué le has hecho a ese chico, que venía con una cara y se ha ido con otra totalmente diferente? La próxima vez se cortará las venas por ti!" Y, de repente, me doy cuenta que no hay nada que me guste más en esta vida que hacer feliz a las personas. Ya sea hablando con ellas, compartiendo mis alegrías, o explicar que el mundo está lleno de oportunidades de ser feliz.

Creo que como proyecto de médico aun ando algo coja. Como proyecto de ser mi persona voy avanzando a grandes pasos

domingo, 2 de junio de 2013

De lo místico

No encuentro palabra adecuada para titular esta entrada para que refleje lo lo surrealista de la situación. La verdad, también me es difícil sacar la energía de mi pequeño corazón para asimilar lo que me está pasando y, como tantas veces he hecho, escribirlo, leerme, y hacerme consciente de la realizad. Igual necesito una dosis de mi rincón ante el mar, correr hasta que salga el alma por la boca y que me llegue a la cabeza todo cuanto necesito saber, sin más.
Es nuevo. Es fuerte. Es increíble. Conectar con alguien de dicha forma, pasar horas y horas juntos sin darte cuenta y sentir que los silencios son tan agradecidos como cada vez que escuchas hablar al otro. Ser feliz, por ejemplo, desde las once de la noche, cuando sé que vas a venir a las doce. Química. Todo místico. Todo espiritual.
Y lo jodido del asunto es que cuando quieras alcanzar el máximo representante de lo espiritual, no puedas.Y lo digas, y todo lo de antes valga una puta mierda. O dirás que no, pero es lo que me haces sentir. Y que sea yo la culpable.
Seguiría hablando, pero prefiero no volver a hundirme en la miseria, gracias.